Por: Jorge A. Walters A.
Un minúsculo virus, (Corona virus), modificado genéticamente en Laboratorio, en cuanto a su natural composición celular, al parecer con fines netamente economicistas y/o macabros (guerra bacteriológica); por alguna razón, se ha escapado al control de la Ciencia y ha puesto en riesgo a toda la humanidad que, con horror y contra su voluntad, se ha visto obligada a permanecer en cuarentena en sus hogares, para minimizar el número de muertos que, en forma exponencial ha venido ocasionando.- … Este ambicioso ser humano que, creía ser el amo del mundo, en su torpe arrogancia sin límites y en su ambición de “TENER” cuanto sea posible, además del daño ya ocasionado contra la Naturaleza, sobreexplotada sin piedad y con fines netamente mercantilista, está viendo con impotencia y pavor, como la producción, el mercado bursátil y la economía mundial se están desplomando, con consecuencias jamás imaginadas .-
Es de esperar que, el despertar de las consciencias que, en Chile alcanzó su máximo nivel, con el estallido social de Octubre pasado, sumado a la llegada al país de la pandemia del Covid-19, haya llevado al ser humano a poner los pies en la tierra para “VER” y REFLEXIONAR sobre el porqué de tantas cosas.-(Causa y efecto) y Preguntarse por ejemplo: ¿Por qué la generosa Naturaleza no hace distingos de razas, ni de credos, ni entre pobres y ricos y brinda luz y calor por igual a todos los seres vivos y en ambos hemisferios?… ¿ Cómo hará la Naturaleza para que, a pesar del hombre, logre mantener el equilibrio y la armonía entre todas las especies?… ¿Será, como parece evidente que, en la Naturaleza están todas las respuestas a nuestros problemas y cegados por la ambición, no hemos sabido VERLAS , ni encontrarlas?… ¿Será la “Proporción Áurea, o Divina”, que yace en la Ley de Fibonacci, la forma armónica en que deban relacionarse: Trabajo, (Fuerza laboral, o Capital humano), Capital monetario y Estado?… ¿ Por qué, ahora pareciera que, sin mano de obra, o trabajo humano, el dinero pareciera no tener valor alguno? ..¿Podrá decirse entonces que, es la mano de obra la que, permite sacar de la inactividad al dinero cesante?… ¿Será que, el dinero, por mucho que se tenga, para nada garantiza inmunidad frente a las pandemias?…
El mundo sin duda, está cambiando para mejor y sin vuelta atrás. El ser humano, al parecer necesitaba un fuerte remezón, de parte de la Naturaleza, para humanizarse y recuperar la sensibilidad perdida, que lo llevó a extraviar el camino, olvidándose del NOSOTROS, de la empatía y de la generosa y fraternal solidaridad.-
La cuarentena nos ha obligado a retroceder en el tiempo y a estrechar lazos afectivos, como cuando las familias tenían la posibilidad de conversar cara a cara, libres de celulares y conocerse mejor entre sus miembros.- Las suspensión de clases en los Colegios y en las Universidades, también ha permitido que, el hogar recupere su rol formativo y valórico, cuya carencia por años ha sido notoria y deficitaria en muchos casos.-
La nueva forma de convivir, ha mejorado la relación familiar, aunque también en forma lamentable, en otros casos, ha empeorado la relación conyugal. a extremos de que, las cifras de violencia intrafamiliar han venido en franco aumento.-
La propagación acelerada del COVID-19 ha dejado en evidencia que, la SALUD es y debe ser mundialmente, un Derecho que, el Estado debe garantizar a todos sus ciudadanos.- De igual manera y por la misma razón, resulta indesmentible que, como ya está sucediendo en otros países, la avalancha de contagiados requiere contar en forma oportuna, con un elevado número de Ventiladores Mecánicos, máscaras y guantes ad hoc que, por lo general no se los tiene.- Ante esta emergencia y dado que, esta pandemia afecta de preferencia, al segmento de más avanzada edad, nos encontramos frente al terrible dilema ético de que, ante su insuficiencia, se tenga que optar, si el ventilador mecánico se le deba asignar al más joven, o al más anciano …¿¿¿.??? …¡Inaudito!
Chile tiene la gran oportunidad de que, tan pronto como, nos libremos del COVID-19 y nos demos una Nueva Constitución que, sea el óptimo Marco Regulatorio, del país en el que queremos vivir, nos aboquemos a trabajar con fervor, unidos como hermanos, con sentida armonía, justicia social, empatía y AMOR fraternal.-
Si Ud. concuerda con lo señalado, Decrete con fuerza y convicción
¡¡¡ QUE ASÍ SEA !!!
